miércoles, 8 de septiembre de 2010

Pura hojalata

- Se que algún día podre quitarte esa armadura de hojalata y que tus sentimientos floten en el ambiente.
- No, no lo harás, porque esta pegada a mi cuerpo, y si la arrancas te darás cuenta de que no tengo nada debajo, solo piel en carne viva y los sentimientos se pueden observar a simple vista. No puedo protegerme y con un simple alfiler puedes crear un daño inimaginable. Yo se que no quieres eso.
- Podría curarte cada día, hacer que esa piel brotase de nuevo para juntarse con la mía, mezclar tus sentimientos con los mios para jamas tener que ocultarlos, yo quiero quererte.
- Tu no quieres quererme, quieres verme sin este cuerpo rígido que me sostiene. No quiero que me mientas. Yo no soy un juguete al que le quitas el envoltorio y si no te gusta puedes dejarlo en una esquina con los demás. Si das ese paso, no puedes volver atrás.
- Demasiado complejo, no me atrevo.
- Te lo avisé, esto de el amor, conmigo no es el mismo juego que juegas con las demás. Hasta siempre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario